El Taoismo es un arte y una ciencia basada en la experiencia y la observación de la naturaleza.
Surge en China, hace 4.000 años, algunos sabios chinos se dieron cuenta de que todo en la naturaleza esta en un proceso de cambio constante, sin pausa, y que la vida es un movimiento que no cesa. Cualquiera puede comprobar este hecho, lo único eterno es la transformación, el cambio. También se observaron que todo cambio implica alguna clase de movimiento y que el movimiento precisa de la existencia de la polaridad; Ying - Yan.
Una vez comprendido esto, pudieron estudiarlas leyes que rigen en el movimiento y los cambios de la naturaleza: este movimiento se produce por la transformación de un polo en otro y viceversa.
El Yang se trasforma en Yin y el Yin en Yang en un circulo perfecto.
La naturaleza determina ciertas leyes para conseguir “La Armonía” entre el Yin y el Yang con Yang no producirán movimiento y por lo tanto habrá estancamiento y muerte.
Yin – Yin: no gira, muerte
Yin – Yang: giro, armonía
Yin – Yin: no hay giro, muerte
Los sabios chinos encontraron un principio único que les permitió comprender la vida y utilizando con éxito en todos sus asuntos: medicina, estrategia militar, arte, sexualidad, cocina, astronomía, agricultura, psicología, etc.…
El adepto a la filosofía taoista busca vivir en armonía. Esta búsqueda lo orienta a descubrir la naturaleza de las cosas; una naturaleza exterior (captar el ambiente, relacionarse con su medio, comprender las reglas intrínsecas que se manifiestan en los actos de los seres vivientes) y una naturaleza exterior (fundamentalmente la conciencia de si mismo unida a la percepción de los sentimientos mas profundos, todo ello a través de la meditación).
El Taoismo preconiza el sometimiento del hombre al Tao, vale decir al curso eterno de los acontecimientos. Reprueba las luchas humanas y aconseja la humildad, la resignación a las cosas que no están al alcance de la mano, la falta de ambición. Como preceptos exige no matar, no beber alcohol, no mentir, no robar y no cometer adulterio. Además recomienda como virtudes la piedad filial, lealtad, bondad hacia las criaturas, paciencia, sacrificio de si mismo por los pobres, liberar a los esclavos, plantar árboles y hacer caminos, enseñar al ignorante y hacer las ofrendas a los dioses. En el Siglo IV a. C. el Taoismo se convirtió en el culto popular cuando sus seguidores se desembarazaron de la metafísica y se entregaron a la práctica de la alquimia, la magia y la adivinación.
El Taoista desenvuelve esta búsqueda por medio de la lectura, la contemplación, o artes marciales. Estas artes o métodos desarrollan una disciplina en el cual la flexibilidad, la relajación, la sutil suavidad de lo percibido se integra con el practicante; se desarrolla una visión única, un sentimiento firme de armonía universal.
Esta práctica se define como empatía: una forma intuitiva de conexión (entre lo consistente e inconsistente) en el cual la observación va causando una resonancia que hace activar en el interior una plenitud espiritual en continuidad y paz.
Este principio lleva a la fusión con la fuente original: El Tao.
A Lao Tse le atribuyen erróneamente muchos occidentales la fundación del Taoismo.
Lao Tse era un taoista de la escuela Tao Te Chia. El taoismo lo fundo Fu Xi, 2.000 años antes del nacimiento de Lao Tse.
Lao Tse llego a ser archivero de los archivos imperiales de la dinastía Zhou, y precisamente allí conoció a Confucio cuando fue a consultar los archivos, bajo la recomendación de Nan Gon Ping Shu, para estudiar ritos.
En el libro escrito por Lao Tse, “Tao-te-King”, propone un camino de salvación muy distinto a Confucio. Su doctrina se acerca al hinduismo. Dice que lo importante es ajarse de todo lo sensorial y caminara hacia lo puro, El Tao.
El Tao es el origen del cielo y la tierra, de quienes surgen todas las cosas, es quien regula el Ying-Yan. Este modelo de comportamiento de todos los hombres y el principio de toda actividad justa en lo político y lo social. Para imitar al Tao hay que tener paciencia, ser sencillos y sin pretensiones. Hay que llegar a no ser nada para poder hacerlo todo. Hay que evitar las tensiones, se desea llegar a una quietud mística.
Las tres virtudes fundamentales del Taoismo: Paz, Tranquilidad y Silencio.
Su modelo es la naturaleza es un buen modelo para el hombre, ella no prolonga indefinidamente la tormenta o el huracán.
Esta metafísica de la no acción construyo a fomentar en el pueblo toda clase de supersticiones y magias, buscando ansiosamente el elixir de la vida.
En la actualidad el Taoismo se encuentra en decadencia, casi extinto.
La esencia del Taoismo ya se encuentra en los libros primitivos chinos, como Shi Ping (libro de las odas) o el Yi Ping (Libros de los cambios). Esta esencia no es otra cosa que la teoría de la armonía entre el Yin y el Yang.
Para el siglo II d.C., Chang Tao Ling la fundo como religión y se nombro su primer “pontífice”. Pero en 1927 tal pontificado fue abolido por el gobierno chino. Sin embargo, el Taoismo sigue siendo con el Confucionismo y el Budismo una de las religiones mas difundías de China. El Taoismo promete la inmortalidad y admite la metempsicosis*.
(*) Creencia en la transmigración del alma de un cuerpo a otro, reencarnación.